SEÑALADOS 7

“Silencio” fue el último corte de este trabajo y el contraste radical con el resto de temas al encuadrarse en esa veta, un tanto mística, con la que siempre he convivido musicalmente, en la que el silencio representa un basamento imprescindible para construir el sonido. En esta ocasión un fondo de guitarra un tanto minimal, con tres notas, apoyadas en un efecto de chorus profundo sobre las que otra guitarra limpia crea contraste y tensión, dejando el espacio justo para la voz que declama más que cantar en el vacío... de "la ausencia". Quizá sea ésta la veta realmente "transida", la que sustenta todo mi quehacer en esta materia intangible del sonido.

SILENCIO

Amistad
Ansiedad que produce el vacío
De la ausencia.

Azar invertebrado
Dotado y amalgamado
Poema improvisado
Que se esfuma entre tus labios.

Como una tirada de dados
Repetida y repetida.
A vueltas y vueltas de años
Para ser o no ser
Una nueva partida.

La otra libertad
Que no se pierde,
Silencio...

Ensayo en "El Pelícano"

Sí, el último corte del CD fue premonitorio sobre el final que tendría el propio grupo. No llegamos siquiera a presentarlo entre los amigos, a pesar de estar un año ensayando. Una historia que tiene explicación, pero que no tiene la mayor transcendencia y ya no viene al caso. De cualquier modo creo que con Señalados no fue un tiempo perdido o, si así lo hubiese sido, habría que considerarlo como necesario para poder volverse uno a encontrar. Porque, ¿si no te pierdes cómo te vas a  encontrar?.

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